MARSHA es una colonia impresa en 3D en Marte

AI Spacefactory ha creado una visión que se ve plausible y cómoda si te quedas adentro.


La NASA ha estado ejecutando un 3D Impreso Habitat Challenge para desarrollar "representaciones digitales de las características físicas y funcionales de una casa en Marte". Al igual que tantas competiciones que vemos aquí en TreeHugger, el premio principal no es nuestro favorito. Correr un segundo muy cercano (ganar $ 20,957.24, o 71 centavos de premio menos dinero que el ganador, basado en puntos) fue la IA. SpaceFactory, que propuso MARSHA.



El video espectacular explica por qué los diseñadores eligieron la forma cilíndrica; encierra más espacio útil que un domo, y el brazo de la impresora 3D no tiene que estirarse demasiado.


Además de ser recipientes a presión altamente efectivos, proporcionan las mayores proporciones de superficie utilizable del piso a la superficie y el área de piso utilizable a volumen y diámetro. Reducir el área de la superficie significa usar menos material bajo menos estrés, reducir el volumen significa reducir las cargas de energía en los sistemas mecánicos y reducir el diámetro reduce directamente las tensiones estructurales, especialmente en la base, donde las fuerzas elevadoras requerirán un anclaje en un terreno incierto. A diferencia de las cúpulas, no producen un volumen de carga inutilizable ni un área perimetral inutilizable.


Hay una ingeniería seria aquí por Thornton Tomasetti, conocido por sus edificios súper altos; El ingeniero Dennis Poon se ve aquí con el autor en una maqueta de ascensor ThyssenKrupp.


Jeffrey Montes y su equipo en AI. SpaceFactory ha creado un material interesante para construir las torres; el domo se imprime a partir de una mezcla de basalto extraído localmente y bioplástico renovable (ácido poliláctico, o PLA) procesado a partir de plantas cultivadas en Marte. El PLA está hecho de almidón de maíz, raíces de yuca o caña de azúcar; no dicen cuántos acres de cultivos se tienen que cultivar para generar suficiente PLA para lanzar un cilindro, pero eso suena como un desafío por sí solo.

PLA tiene innumerables aplicaciones como material fungible a través de la línea de tiempo completa de la misión. Al ser un bioplástico, tiene el beneficio adicional de los modos duales de fabricación in-situ: a través de la fermentación de carbohidratos por bacterias o mediante quimio-catálisis. En la Tierra, la mayoría del PLA se deriva de los polisacáridos producidos por las plantas. Lo mismo podría llevarse a cabo en un futuro asentamiento de Marte, donde las plantas inevitables y otros desechos biológicos brindan la oportunidad de cerrar los circuitos material / metabólicos.

Sin embargo, hacer crecer tus propios materiales en Marte tiene mucho sentido cuando haces los cálculos para enviarlos allí sin Amazon Prime; se necesitan 90 libras de combustible para obtener una libra de material para Marte. Crecer tiene mucho más sentido que enviarlo.

Todo el cilindro está sujeto a una base que permite tensiones térmicas y cargas de viento significativas. Luego, la impresora comienza a trabajar creando la estructura de doble capa.


El diseño de Marsha está dividido en zonas con estos dos principios en mente. A nivel del suelo, el "garaje" es la interfaz con sistemas externos y actividades de exploración con un "laboratorio húmedo" de apoyo.


"Justo encima hay 34 metros cuadrados de laboratorio seco conjunto y cocina que actúa como el centro principal." No estoy seguro de que esta sea una buena idea. Cuando ayudé en el laboratorio en el Centro de Ciencias de Ontario hace años, nos dijeron que nunca debíamos almorzar en la misma habitación que el laboratorio; no quieres comer lo incorrecto


En el tercer nivel se encuentran las cabañas individuales, "pod de saneamiento" y jardín hidropónico.


Y en la parte superior, el luminoso "Skyroom" está dedicado a usos recreativos informales y ejercicio. Cada nivel tiene al menos 1 ventana, que juntas cubren el panorama completo de 360 ​​°. Esto es bueno, porque es difícil decirles a los niños que jueguen afuera.


Elon Musk ha dicho: "Me gustaría morir en Marte". Simplemente no en el impacto. "No sé cuántas personas comparten esa fascinación, pero sí sé que el equipo del proyecto MARSHA ha diseñado espacios en los que sería bueno pasar el tiempo. En realidad, puede que no sea un mal lugar para envejecer, dado que solo pesas el 38 por ciento, por lo que subir esas grandes escaleras será muy fácil.


Afuera, habrá mucho que hacer: quitar el polvo de los paneles solares, mantener las plantas nucleares y hacer crecer las plantas productoras de PLA. Lo que amo de esta visión es que parece plausible.

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